Para una persona que ha sufrido un daño a causa de la mordedura de un perro, esto puede ser una experiencia muy dolorosa, ya que las lesiones y los procedimientos médicos pueden afectar física y psicológicamente a la víctima y lo que muchos no saben es que se pueden tomar acciones legales para llegar a obtener una indemnización. Existen leyes diseñadas por cada estado para abordar este tipo de situaciones.
Si usted o alguien a quien conoce ha sido víctima de un hecho como este, es importante que conozca información importante antes de actuar legalmente si desea conseguir una indemnización.
¿En quién recae la responsabilidad?
En algunos estados, las leyes son estrictas en cuanto a la obligación que recae sobre el dueño del perro, debido a que es el responsable por las acciones del animal, entre ellas, el gasto por facturas médicas a causa del ataque que pueda presentar la víctima.
Determinar la responsabilidad es un elemento importante debido a que la persona lesionada por la mordedura de un perro normalmente experimenta daño emocional, como ansiedad y miedo a la presencia de estos animales. Saber quién fue el culpable hace más sencillo para las víctimas presentar un reclamo de seguros, para que de este modo se obtenga la indemnización a causa de la mordedura.
Para que la ley pueda detectar la obligación del dueño, se deben identificar cuál de los tres tipos de responsabilidades existentes es la que se acomoda al caso:
Responsabilidad objetiva
En esta situación, la ley indica que el propietario del perro es netamente responsable por los daños que pueda causar el animal, En este tipo de culpa, la persona que ha permitido que se produzca el incidente tiene la obligación de compensar a la víctima, de esta manera se entiende que legalmente, es la situación que más favorece a la persona que ha sufrido las lesiones.
Si el perro había causado daños anteriormente
En ciertos estados, el propietario del animal no necesariamente es hallado culpable por la primera mordida que ha causado el perro, sin embargo, si el dueño del perro tiene conocimiento de que el animal se estaba comportando de una forma agresiva o había lesionado anteriormente a alguien más, puede ser responsabilizada por las mordeduras ocasionadas luego del primer incidente.
Negligencia
En algunos estados existe algo conocido como sistema de negligencia o de culpa, en la cual el dueño del perro debe comprobar que se cometió negligencia al no prevenir el incidente o porque no pudo controlar al animal cuando este iba a atacar. Si la víctima quiere hacer uso de esta responsabilidad para generar el reclamo, debe demostrar que la negligencia se produjo por descuido del propietario del animal.
¿Qué alternativas tiene la víctima para reclamar?
Existen varias alternativas con las cuales una víctima puede presentar una reclamación por la mordedura de un perro.
Suponiendo que el dueño del perro cuente con una póliza de seguro de hogar (la cual ofrece cobertura por este tipo de incidentes), los abogados que representan a las víctimas de lesiones personales tienen la elección de presentar un reclamo a la aseguradora para que cubra los daños presentados. Esto llega a ser de mucha utilidad para los dueños del animal, ya que, esto significa que no tendrán que pagar de su bolsillo, en lugar de esto, la aseguradora se encargará de cubrir los gastos.
Otra manera es que en el caso de que no sea posible llegar a un acuerdo, la víctima tiene la opción de presentar una demanda por daños y perjuicios. Para ello, lo primero es recolectar la mayor información y detalle de lo sucedido, como fotografías de la lesión, fotos del perro e información de contacto del dueño del animal. Así mismo, puede ser de mucha ayuda buscar si el perro tiene historial de comportamiento agresivo, también debe guardar la documentación de las citas con el médico y los procedimientos a los que ha tenido que ser sometido a causa de las lesiones por la mordedura. Cuanto más detalle posea la víctima, más sencillo será presentar un reclamo de seguro o una demanda por daños y prejuicios para poder costear las facturas médicas, terapias, salarios perdidos, entre otros.
Por otro lado, la víctima puede elegir negociar con el dueño del perro para llegar a un acuerdo (sea directamente con el propietario del animal o con la aseguradora), o puede escoger presentar una demanda.
Una víctima de lesiones sufridas a causa de la mordedura de un perro debe conocer cuál es el tipo de responsabilidad que se puede adjudicar al propietario del animal, también puede escoger cuál es la alternativa que más se acomoda a su caso para lograr conseguir una indemnización por los daños ocasionados.
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