En los Estados Unidos, el término “limones” hace referencia a los autos nuevos que tienen fallas repetitivas e irreparables. Se estima que cada año, al menos el 1% de los vehículos nuevos son considerados limones, es por ello que cada estado ha promulgado la “Ley Limón”, con el objetivo de poder ayudar a los conductores que se han visto afectados a causa de estos automóviles defectuosos.
Si una persona quiere obtener un reembolso o un automóvil nuevo a cambio del defectuoso, es necesario que sepa cuando califica para ser considerado limón.
¿Qué califica como limón?
Aunque hay estados que tienen una variación de esta ley, la calificación para que un automóvil sea catalogado como limón es igual, y aplica cuando tiene alguna de las siguientes características:
- Cuando tiene un defecto sustancial, el cual está cubierto por la garantía, y se presentó dentro de un lapso de tiempo o un número de millas recorridas, después de que se adquirió el automóvil.
- La falla no pudo ser reparada después de un número razonable de intentos.
En casi todos los estados la Ley Limón solo aplica para vehículos nuevos, sin embargo, en algunos casos es posible que se hagan excepciones.
Defectos sustanciales
Este es un problema que afecta el uso, valor o seguridad del automóvil, como por ejemplo, una falla en los frenos o llantas y está cubierto por la garantía. Los defectos menores, como deficiencias en las manijas, no son considerados legalmente un defecto sustancial.
Por otro lado, en todos los estados, los defectos sustanciales deben ser presentados por la persona dentro de un tiempo determinado o dentro de un número de millas recorridas. Además, que los defectos no deben haberse causado por el uso indebido del automóvil.
Intentos de reparación
La persona debe permitirle al distribuidor o fabricante realizar un número razonable de intentos para poder solucionar el problema sustancial, antes de que pueda ser catalogado como limón. Normalmente, el automóvil tiene que cumplir con alguno de los siguientes estándares para que pueda ser protegido por esta ley:
- Debe tener un defecto de seguridad grave, por ejemplo, que involucre los frenos o la dirección mecánica.
- En caso de que no sea un defecto de seguridad grave, y no pudo ser arreglado después de tres o cuatro intentos de reparación. Cabe aclarar que este número de intentos varía según el estado.
- Si el vehículo se encuentra fuera de servicio por un periodo de tiempo a causa de uno o más defectos sustanciales cubiertos por la garantía, es probable que aplique para ser considerado limón.
Obtener un reembolso o la sustitución del automóvil
En el caso de que un auto cumpla con los estándares de la ley en el estado correspondiente, la persona tiene derecho a obtener un reembolso o un vehículo nuevo por parte del fabricante. Es importante mencionar, que el procedimiento puede ser diferente dependiendo del estado, sin embargo, en todos los estados donde se presente esta situación, la persona debe mencionar el defecto al fabricante antes de comenzar. Si el fabricante y la persona afectada no llegan a un acuerdo, será necesario que el caso se someta a un arbitraje antes de ir a la corte.
Le puede interesar: ¿Qué sucede cuando los frenos defectuosos causan un accidente?