Generalmente, cuando pensamos en la mala praxis médica, pensamos en los médicos que cometen errores de diagnóstico, medicación o cirugía. Pero no tendemos a pensar en errores que ocurren en la oficina de un odontólogo.
La verdad es que confiamos nuestra salud a los odontólogos tanto como a los cardiólogos, ortopedistas o cirujanos. Y, tristemente, los errores en el cuidado dental pueden ser igual de costosos. Entérese de algunos de los problemas más comunes de negligencia dental y cómo las víctimas pueden usar las demandas por negligencia médica para recuperarse de sus lesiones.
Incumplimiento del estándar de atención
Los pacientes en Oklahoma demandaron a un odontólogo después de que se reveló que las condiciones insalubres de su oficina posiblemente expusieron a sus pacientes a la hepatitis y el VIH. Los odontólogos deben a sus pacientes un nivel de cuidado igual al nivel de habilidad, experiencia y cuidado que poseen y practican los odontólogos en la misma o similar comunidad, y bajo circunstancias similares.
Es obvio que la mayoría de los odontólogos de Oklahoma, y de otros lugares, deberían mantener sus consultorios libres de enfermedades, y éste en particular probablemente no cumplió con su deber de cuidado. Con la cantidad de pacientes que ven y el tipo de cuidado que se proporciona, los odontólogos toman precauciones adicionales para mantener los consultorios limpios y los equipos estériles.
Tratamiento injustificado
También ha habido casos de pacientes que han usado frenillos durante más de una década, cuando el tiempo promedio para usarlos es de uno a tres años. Mientras tanto, a los odontólogos se les paga por mantener y ajustar los frenillos.
Los odontólogos están obligados a obtener el consentimiento informado de sus pacientes en relación con las opciones de tratamiento, de lo contrario cualquier tratamiento no está autorizado. Es probable que si los pacientes hubieran sabido que los años adicionales de frenillos eran innecesarios, no hubieran aceptado usarlos.
Errores quirúrgicos
Podemos olvidarnos de que la cirugía dental sigue siendo una cirugía, y los mismos temas de la anestesia y el cuidado quirúrgico entran en juego. Y las muertes durante lo que parecen ser cirugías dentales de rutina no son raras. Cualquier cirugía conlleva un riesgo. Pero los odontólogos deben estar adecuadamente entrenados y certificados para manejar cualquier exigencia sin exponer a los pacientes a daños adicionales.
Si cree que ha sido lesionado por la mala atención que recibió de un odontólogo, debe hablar con un asesor legal especializado en negligencia médica para saber más sobre sus derechos y opciones legales.