La falsificación normalmente hace referencia cuando alguien suplanta una firma sin permiso, realiza un documento falso o cambia algún documento existente sin autorización. El delito más común de falsificación es cuando alguien firma bajo el nombre de otra persona un cheque, documentos o contratos.
Los tipos más comunes de falsificación de documentos incluye:
- Documentos que emite el gobierno, tales como, pasaportes, licencias de conducir y las tarjetas de identificación estatales.
- Documentos transaccionales como escrituras, subvenciones y recibos.
- Elementos financieros tales como dinero en efectivo, cheques y certificados de acciones.
- Otros documentos como testamentos, recetas médicas, fichas y obras de arte.
Falsificación de firmas
Falsificar una firma consiste cuando una persona de forma deliberada falsificó la firma de otra persona. Esta licencia puede estar en una licencia de conducir, escritura, testamento, cheque u otro documento. Cuando alguien firma un documento legalmente significa que la persona está de acuerdo con las especificaciones establecidas en el mismo.
Falsificación de recetas médicas
La falsificación de una receta sucede cuando una persona altera una receta ya existente, para poder falsificar la firma de un médico o crear la receta en su totalidad con el objetivo de obtener medicamentos para su uso personal. Normalmente las personas cometen este delito debido a que son adictas a medicamentos que son recetados.
Intención
La intención de engañar o cometer algún fraude o hurto es esencial para que una persona sea imputada por un delito de falsificación. La intencionalidad es justificación suficiente para que una persona sea sentenciada, independientemente si logró cometer el delito o no.
Poseer documentos falsificados
Una persona que tenga un documento falso no ha cometido un delito a menos que sepa que el documento o artículo eran falsos y lo utilizara para poder defraudar a una persona o entidad. Por ejemplo, si alguien recibió un cheque falso como el pago de un servicio prestado y desconocía que era falsificado y lo cobró, no será acusado de ningún delito.
Sanciones
Las sanciones por falsificaciones pueden variar dependiendo del estado. En muchos estados este delito está dividido en diferentes grados (primero, segundo y tercer) o clases. Normalmente las falsificaciones de primer y segundo grado son consideradas delitos mayores y la de tercer grado un delito menor. La severidad del caso dependerá de lo que haya falsificado la persona.
En algunos estados el castigo por falsificación de símbolos es un delito menor de clase A. Siendo el delito menor más grave, donde el acusado puede sufrir hasta un año de cárcel y una multa de dos mil dólares. Por otro lado cuando alguien falsifica un documento financiero u oficiales puede ser procesado bajo un delito mayor clase C o D, donde el acusado puede.
Todas las demás falsificación son consideradas un delito menor de clase B, C o D, donde el acusado puede sufrir una sentencia de hasta seis meses de cárcel y una multa de hasta mil dólares.