Inmunidad gubernamental: protección para el Estado

La inmunidad gubernamental impide que las personas demanden al gobierno y a los empleados y funcionarios del gobierno en muchos casos. Esta política hace que sea más fácil para el gobierno tomar decisiones porque lo protege de la interferencia de los juicios. Por ejemplo, no puede demandar a la legislatura estatal por dinero si aprueban una ley que le perjudica. La inmunidad del gobierno detendrá cualquier demanda en la que un fallo a favor del demandante pueda controlar las acciones del estado o someterlo a responsabilidad.

¿Qué cubre la inmunidad del gobierno?

• La inmunidad del gobierno cubre muchas entidades gubernamentales que incluyen:
• Estado, ciudades y condados.
• Legislaturas.
• Agencias, juntas, autoridades y comisiones.
• Corporaciones gubernamentales.
• Tribunales.
• Escuelas, policía y otros departamentos locales.

Demandas al gobierno

La inmunidad del gobierno no impide que se presenten demandas contra el gobierno. Sin embargo, incluso si puede demandar, el gobierno también puede ser inmune a los tipos de compensaciones, como los daños punitivos. Hay muchas situaciones donde demandar al gobierno es apropiado:

• La inmunidad solo se aplica a demandas que intentan obligar al gobierno a actuar o que exigen daños monetarios. Puede demandar al gobierno por una sentencia declaratoria, para protestar por una orden judicial injusta y por una reparación equitativa. En general, puede demandar para restringir al gobierno de alguna manera, pero no forzarlo a actuar.
• Puede demandar si un empleado, funcionario o agencia del gobierno abusa de su autoridad o actúa más allá de ella. Los empleados están protegidos por actos y omisiones en el ámbito de su empleo, pero no más allá.
• Muchos lugares tienen excepciones para daños marítimos, casos de derechos civiles e incumplimiento de contrato.
• Si hay una relación especial con el gobierno, o una conexión específica que impone un deber de cuidado, el gobierno puede ser responsable si no cumple con su deber. Sin embargo, algunos lugares restringen esto si la relación implica prevenir el delito, nombrar funcionarios competentes o tomar decisiones judiciales correctas.
• Demandar a las personas que trabajan para el gobierno si en realidad son empleados privados o contratistas independientes.
• La legislatura puede hacer leyes que otorguen inmunidad específicamente o eliminen inmunidad en situaciones. También puede renunciar a la inmunidad en ciertos casos si así lo desea. Por ejemplo, si el gobierno compra un seguro de responsabilidad civil para protegerse contra un tipo de responsabilidad civil extracontractual, se asume que el gobierno renuncia a su inmunidad y puede responder hasta el monto de la póliza.
• En algunos lugares, un tribunal puede decidir abolir la inmunidad gubernamental en un caso determinado.
•  Solo los actos de negligencia ordinaria reciben inmunidad. Si el gobierno, o un empleado del gobierno, comete un acto de negligencia grave o imprudencia, no hay inmunidad.