¿Cómo demandar a un sacerdote por abuso sexual infantil en Estados Unidos?

Para muchos, la diócesis y todo lo que se relaciona con la iglesia católica (o cualquier otra religión) son considerados como figuras institucionales confiables por ser representantes más cercanos a Dios. Sin embargo, en la actualidad las demandas de abuso infantil por parte de los sacerdotes han aumentado en los Estados Unidos. Esta alza de denuncias ha aparecido quizás porque en el presente, la violencia sexual se ha visibilizado de cierta forma, es decir, mediante la educación, manifestaciones, y enseñanzas cotidianas que salen del contexto educativo donde, precisamente se ha empleado más conocimiento al respecto.

Ser víctima de un abuso sexual siendo un niño, no es un fenómeno fácil de identificar y muchos menos de digerir, pues la capacidad mental de los mismos no es tan madura para reconocer lo que está sucediendo.

¿Cómo se puede demandar un abuso sexual infantil por parte de sacerdotes?

Se sabe que si el abuso infantil es un delito grave, entonces el abuso sexual infantil pasa a ser uno de los peores delitos que se encuentran en la clasificación que expone las leyes criminales de los Estados Unidos. Ya que, no sólo se trata de una violencia sexual, sino todo lo que acarrea: Los daños corporales que el menor pudo haber sufrido, las lesiones psicológicas que puede perjudicar su cotidianidad y desenvolvimiento social de por vida, entre otros factores fundamentales.

Evidentemente, las normativas legales intentan abarcar cualquier daño que pueda sufrir una víctima abusada sexualmente, pero lo más importante es culpabilizar al agresor y hacer que sufra una sentencia de cárcel por el crimen cometido.

Pasos a seguir:

1. Lo primero que se debe hacer, es consolidar una consulta médica para determinar cuáles son los daños que ha sufrido el menor de edad. Este punto es principal, ya que, se tiene que cubrir dichas lesiones, pero, también funciona como fundamento y argumento para entablar una denuncia contra el agresor.
   
2. Se tiene que dirigir a la instancia policial más cercana para realizar la debida demanda.
   
3. Buscar un abogado que pueda asesorar de forma adecuada los pasos que se deben hacer y cómo se tiene que realizar dicho proceso legal. Es necesario que el mismo, sea un profesional especializado en abusos infantiles. En dado caso de no tener suficiente dinero para cancelar los honorarios, entonces el estado le debe otorgar uno que defienda los derechos del menor.
   
4. Estar consciente de que una demanda por abuso infantil bien sea ejercida por un sacerdote o cualquier otra persona, es un proceso largo y complicado. Ya que, los juicios de esta índole requieren mucho análisis e investigación para determinar la culpabilidad del agresor.
   
5. Una de las soluciones que ofrece el juzgado, es en primera instancia condenar directamente al agresor, en este caso, el sacerdote. Y, al mismo tiempo, habilitar una compensación económica que pueda cubrir con todos los daños producidos por parte del agresor al menor de edad. Bien sean, médicos, psicológicos o de cualquier otra índole.
   

Los abusos sexuales infantiles impartidos por un sacerdote poseen socialmente una doble infracción. En un sentido legal, pues como se dijo anteriormente la violencia sexual se encuentra dentro de la clasificación de los delitos en Estados Unidos, pero, también en un sentido moral, ético y religioso.

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